Defensor se clasificó a los cuartos de final de la Copa Sudamericana 2007 pese a caer por 2-0 en su visita a El Nacional de Ecuador, en el partido de vuelta disputado la noche del jueves en el estadio Atahualpa de Quito.
El atacante Ebelio Ordóñez convirtió las dos anotaciones (15 y 27) para el cuadro militar, que había sido derrotado por tres tantos en el juego de ida, disputado el 20 de septiembre en el estadio Centenario de Montevideo.
El club uruguayo, que supo aguantar la arremetida de la ´máquina roja´, enfrentará en la siguiente ronda al argentino River Plate, que eliminó al brasileño Botafogo.
El Nacional se quedó a un gol de forzar la tanda de penales después de un primer tiempo arrollador. Sin embargo, en la segunda parte bajó las revoluciones y le dio oportunidad a los uruguayos de recuperarse y quedarse con el pase a cuartos.
Los dirigidos por el estratega de origen uruguayo Ever Almeida sorprendieron a los charrúas con un juego rápido y contundente, que los puso en desventaja al minuto 15 con un puntillazo de Ordóñez.
La anotación avivó las esperanzas de los locales, que salieron en busca de la segunda conquista aprovechando una noche de inspiración de Iván Kaviedes.
El volante creativo, que se recuperó de una lesión que lo alejó de las canchas por varias fechas, estuvo siempre en las jugadas de riesgo. En un saque a distancia del arquero militar, apareció para conectar, de espalda a los defensas, una pelota que dejó en posición de gol a Ordóñez.
El goleador sólo tuvo que dar el puntazo a la salida del arquero Martín Silva para aumentar el marcador. El Nacional se crecía en la cancha, pero la expulsión, al minuto 35, de uno de uno de los zagueros cambió la historia del juego.
Con un hombre menos, el club militar encaró la segunda parte sin la contundencia de los primeros minutos. Defensor Sporting supo quitarle la pelota y meter el juego en el congelador.
El volante Alvaro Navarro creó varias oportunidades que pudieron cambiarle la cara al marcador. No obstante, la falta de definición privó a los uruguayos del gol, aunque al final salieron con el boleto a cuartos entre las manos en una noche en que la ´máquina roja´ sólo funcionó un tiempo.
El atacante Ebelio Ordóñez convirtió las dos anotaciones (15 y 27) para el cuadro militar, que había sido derrotado por tres tantos en el juego de ida, disputado el 20 de septiembre en el estadio Centenario de Montevideo.
El club uruguayo, que supo aguantar la arremetida de la ´máquina roja´, enfrentará en la siguiente ronda al argentino River Plate, que eliminó al brasileño Botafogo.
El Nacional se quedó a un gol de forzar la tanda de penales después de un primer tiempo arrollador. Sin embargo, en la segunda parte bajó las revoluciones y le dio oportunidad a los uruguayos de recuperarse y quedarse con el pase a cuartos.
Los dirigidos por el estratega de origen uruguayo Ever Almeida sorprendieron a los charrúas con un juego rápido y contundente, que los puso en desventaja al minuto 15 con un puntillazo de Ordóñez.
La anotación avivó las esperanzas de los locales, que salieron en busca de la segunda conquista aprovechando una noche de inspiración de Iván Kaviedes.
El volante creativo, que se recuperó de una lesión que lo alejó de las canchas por varias fechas, estuvo siempre en las jugadas de riesgo. En un saque a distancia del arquero militar, apareció para conectar, de espalda a los defensas, una pelota que dejó en posición de gol a Ordóñez.
El goleador sólo tuvo que dar el puntazo a la salida del arquero Martín Silva para aumentar el marcador. El Nacional se crecía en la cancha, pero la expulsión, al minuto 35, de uno de uno de los zagueros cambió la historia del juego.
Con un hombre menos, el club militar encaró la segunda parte sin la contundencia de los primeros minutos. Defensor Sporting supo quitarle la pelota y meter el juego en el congelador.
El volante Alvaro Navarro creó varias oportunidades que pudieron cambiarle la cara al marcador. No obstante, la falta de definición privó a los uruguayos del gol, aunque al final salieron con el boleto a cuartos entre las manos en una noche en que la ´máquina roja´ sólo funcionó un tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario